domingo, 30 de junio de 2013

10 articulos dificiles de utilizar

Un artista ha creado unas imágenes de artículos cotidianos en objetos divertidos y casi imposible de usar. Giuseppe Colarusso, de 49 años, formó la única obra para que la gente cuestiona la funcionalidad de la talla de cuchillería, herramientas de jardín y equipo de oficina. 1._ Palillos de madera al instante ¿que tal? 2._ No [...]



Vía Curiosidades

¿Para qué sirve la minería de los datos personales?

asGracias a Internet, el posicionamiento GPS , las redes sociales, la localización de los consumidores potenciales gracias al rastreo de las cookies de sus navegadores digitales, la detección y reconocimiento de rostros y demás datos podemos acceder a las costumbres personales de muchas personas.


Estos datos cada vez son más precisos y se generan a una velocidad que se duplica cada poco: hasta 2003, el exdirector ejecutivo de Google afirmaba que la humanidad había generado unos 5 exabytes de datos en toda su historia. Actualmente se genera esa cantidad de información cada 48 horas.


Tales datos también están redefiniendo lo que consideramos privacidad y lo que no, sobre todo al advenimiento de dispositivos como cámaras que registrarán toda nuestra vida y la subirán a la nube). Bienvenidos al lifelogging.



Toda esa riqueza informativa a menudo es desperdiciada, y si acaso la emplean determinadas empresas para vendernos más o mejor sus productos. Sin embargo, tal vez valdría la pena reclamar toda esa información para el uso público a fin de explotarla para hazañas que todavía no podemos ni siquiera imaginar.


David Rowan, director de la edición británica de la revista Wired, abunda en ello en Este libro le hará más inteligente, editado por John Brockman:


Tanto el ciudadano concreto como el conjunto de la sociedad saldrían beneficiados si se permitiera indagar en los flujos de datos personales al objeto de extraer pautas de nuestra conducta. Este tipo de extracción de datos podría conseguir que la información bruta se transformara en una información dotada de la posibilidad de predecir comportamiento, permitiendo así que yo mismo me anticipara a mis propio estados de ánimo y mejorara por tanto mi eficiencia, circunstancia que no solo podría convertirme en una persona más sana y dotada de una mayor intuición emocional, sino que pondría de manifiesto mis debilidades académicas y los puntos fuertes de mi creatividad.

as


Quiero descubrir los significados ocultos, las correlaciones inesperadas que señalan la existencia de esta o aquélla tendencia, los datos que indican la presencia de unos factores de riesgo de los que quizá no alcanzara a tener conciencia de otro modo…

Horas de sueño, ejercicio físico diario, tiempo de vigilia, período de productividad, respuestas farmacéuticas, ADN, número de pulsaciones cardíacas, tipo de dieta, gastos económicos… todo eso y mucho más volcado en la red y compartido con todos los demás a fin de practicar minería de datos.


Los datos ya están ahí, en gran parte, y tan sólo debemos promover políticas que animen a la gente a servirse de ellos, a compartirlos, a que los transformen en fuentes de conocimiento colectivo. La Wikipedia de la realidad.


El cúmulo de gratificaciones que permitirá poner a nuestra disposición esta forma de pensar tendrá un carácter más altruista que narcisista, ya sea en el ámbito de la creación de un fondo común de datos personales destinados a la obtención de un mayor conocimiento científico (como en el caso de la compañía llamada 23andMe), ya sea en el terreno de la propagación de datos remitidos por los propios usuarios con vistas a impulsar y motivar la verificación de cambios de comportamiento en terceras personas (como sucede con Traineo.com)











Vía Xatakaciencia

[Vídeo] ¿Un collar que viola la ley de la gravedad?

asAl efecto lo denominan “Newton’s Beads” y, a pesar de lo sencillo, resulta tremendamente espectacular. Como si se violara la ley de la gravedad. El collar de cuentas metálicas abandona el tarro donde está alojado como si fuera una criatura viva.


Steve Mould explica y demuestra en este vídeo a cámara lenta.




Vía | Microsiervos












Vía Xatakaciencia

Los fantasmas que se esconden en el Himalaya

En un rincón rural de India, los del más acá creen en visitas de los del más allá. Los templos protegen a la gente en el pueblo, pero los bosques que les rodean están plagados de criaturas aterradoras.



Vía BBCMundo.com | Curiosidades

Imágenes insólitas de la semana, Junio 30, 2013

1) Prohibido jugar en el patio Una tromba de agua se vio frente a la costa de Grand Isle, Louisiana. Afortunadamente no causó daños graves, eso sí permitió a “Buggie” Vegas, propietario de Bridge Side Cabins and Marina en Grand Isle, tomar esta impresionante foto 2) Una verdadera lucha por la comida Les va a [...]



Vía Curiosidades

Cómo eliminar el 'gusano de la oreja'

gusanoDe repente, empezamos a tararear o silbar determinadas canciones y ya no podemos quitárnoslas de la cabeza. Tal vez el último éxito del verano, o incluso algún tema musical que odiamos profundamente. Sin embargo, está como metido en nuestra cabeza, catequísticamente. Estamos, pues, ante un gusano auditivo o neurogusano. También, en inglés, earworm, y en aleman, ohrwurm.


Habla de ello el neurólogo Oliver Sacks en su libro Musicofilia, llegando a comparar el neurogusano con “un tic o un ataque”. De algún modo, las notas musicales de la canción nos han infectado, como si fueran un virus.


La razón de que nuestro cerebro sea tan proclive a dejarse contaminar por canciones como éstas (generalmente un poco bobas) es que nuestra mente trata de completar una melodía inconclusa (según algunos psicólogos) o sencillamente es la manera de que la mente siga trabajando mientras está ociosa (según otros). Pero ¿os imagináis que existe una manera de hacer desaparecer este insidioso gusano musical?



La psicóloga Ira Hyman, de la Universidad Western Washington, sometió a un grupo de voluntarios a un bombardeo de temas de los Beatles, Lady Gagá y Beyoncé, y parece haber encontrado una solución:


Si puedes hacer algo automáticamente, como conducir o caminar eso significa que no estás usando toda tu capacidad cognitiva, de modo que queda mucho espacio libre para que tu loro interno empiece a sonar. (…) Del mismo modo, si estás intentando hacer algo realmente duro, entonces tu cerebro no se compromete lo suficiente, de modo que la música vuelve. Lo que necesitas es algo a mitad de camino, que no deje demasiado espacio libre en el cerebro. Tareas verbales como resolver anagramas o leer una buena novela pueden ayudar a mitigar el efecto bucle de la tonadilla.

Vía | Futuretech












Vía Xatakaciencia

sábado, 29 de junio de 2013

Previsión meteorológica en la compresa de una coja

radio-eltiempo




En la previsión meteorológica del programa 79 de El Mundo Today, Ana Boyero nos dice qué tiempo hará esta semana en la compresa de una coja:









Vía El Mundo Today

Insólito – Casi se come una cuchilla de afeitar

Charles Fuentes Aguirre que vive en el barrio Los Calamares, (Colombia) contó el momento en que su pequeña de apenas 6 años, se sacaba de la boca un filoso metal.Era un pedazo de una cuchilla de acero inoxidable, que se encontró la menor, mientras masticaba el pan de queso que le había dado su madre [...]



Vía Curiosidades

[Vídeo] La minicámara que registra todos los momentos de tu vida

MemotoUna cámara de 5 megapíxeles y GPS que se puede enganchar fácilmente a la ropa, o colgar a modo de collar. Se llama Memoto.


Toma una foto geolocalizada y datada cada 30 segundos (y da igual en qué posición estés, siempre saldrán derechas) y las va almacenando ordenadamente. Cuando lo conectas a tu ordenador, todas las fotos se van guardando en la “nube”. Algo que puede redefinir de nuevo la línea divisoria entre vida privada y vida pública.














Vía Xatakaciencia

Diez cosas que probablemente no sabía la semana pasada

Repase algunas de las noticias más curiosas de esta semana que acaba con BBC Mundo.



Vía BBCMundo.com | Curiosidades

Las frutas y verduras que compras aún estás vivas

verdurasA la hora de verter una opinión sobre bioética, desde la conveniencia del aborto hasta la del consumo de animales o el maltrato animal, hemos de trazar líneas arbitrarias que delimiten, por ejemplo, qué clase de vida es susceptible de nuestro respeto y qué vida no lo es.


Sin líneas arbitrarias, incluso apagar un videojuego podría constituir el asesinato de sus personajes. Y también lo podría ser, por ejemplo, comernos una zanahoria. Por eso las líneas, ya que son arbitrarias, deben de estar fundadas en la mayor cantidad de conocimientos y evidencias posibles.


El tema de las zanahorias no es en absoluto baladí (tampoco lo son las inteligencias artificiales), sobre todo si prestamos atención a un estudio de investigadores de la Universidad de Rice (EEUU) que, en el último número de la revista ‘Current Biology’, sugieren que los vegetales que compramos a diario siguen vivos ya que, incluso después de la cosecha, responden a las señales de luz y, por lo tanto, cambian su biología mejorando su resistencia ante los insectos y sus valores nutricionales.



Como imaginaréis, la definición de vida también está continuamente en revisión, y también deben trazarse líneas más o menos arbitrarias.


El propósito del estudio, sin embargo, no era filosófico, sino sencillamente poner en alerta sobre el mejor momento en que podemos consumir vegetales, tal y como explica Janet Braam, investigadora de la Universidad de Rice y coautora del estudio, en declaraciones a la agencia SINC:


Este trabajo muestra que las verduras y las frutas después de recolectarlas responden a los tratamientos externos y, por lo tanto, debemos pensar en ellas como plantas vivas. (…) Tal vez deberíamos guardar nuestras verduras y frutas bajo ciclos de luz-oscuridad, y elegir el mejor momento para cocinarlos y comerlos con el fin de aumentar su valor nutricional.

Según Braam y su equipo, si los relojes circadianos de la poscosecha de las verduras y frutas se mantienen después de la recolección, y si controlan los niveles de nutrientes y fitoquímicos importantes para la salud, puede ser beneficioso mantener su reloj y comer o cocinar las verduras y frutas en los momentos del día en que más se enriquecen de estos metabolitos beneficiosos.


Por ejemplo, las verduras crucíferas, como la col, el brócoli y las coles de Bruselas, acumulan glucosinolatos, que tienen efectos anticancerígenos. Por lo tanto, los expertos creen que este trabajo puede mejorar el almacenamiento de alimentos para que los alimentos sean más saludables.


Volviendo al aspecto filosófico del asunto, y a fin de generar un poco de debate, estos descubrimientos también deberíamos hacernos plantearnos por qué prestamos tanta atención de determinados animales (normalmente los bonitos… a las cucarachas que las zumben), y no a determinados vegetales; porqué se presta atención a la vida natural y no a la artificial, etc.


La diferencia entre una postura moral defendible y un sentimiento visceral atávico es que con la primera podemos dar razones de por qué es válida nuestra convicción. La ciencia, en ese sentido, sobre todo la biología, puede surtirnos de razones objetivas y sólidas.


Porque la intuición personal acostumbra a ser altamente peligrosa en muchas ocasiones. Un ejemplo burdo: si una computadora simulara un comportamiento muy parecido al de un ser humano gracias a una Inteligencia Artificial sumamente avanzada, podría dar gato por liebre a más de uno y hacerle creer que tras la computadora hay un ser humano. Hoy en día nos aproximamos bastante a esta frontera: si participamos en un videojuego online, ¿sabemos siempre, sin ninguna duda, quién es un ser humano y quién, una máquina?


Tenedlo en cuenta la próxima vez que os comáis una zanahoria.


Podéis alimentar el debate con Encuesta: ¿comeríais cerdos insensibles al dolor?


Vía | AgenciaSINC












Vía Xatakaciencia