En el corazón del East End londinense se encuentra la Casa Malplaquet exudando una misteriosa grandeza que hace que cualquier persona que camine junto a ella tenga que volver la cabeza y echar una mirada más allá de sus puertas de hierro forjado.
La mansión como tal había sido ocupada por última vez en 1895, posteriormente se dividió en pequeños apartamentos y el piso superior era usado como almacén, además se establecieron tiendas en el jardín delantero de la mansión. Knox y Longstaffe-Gowan se encargaron de restaurar y devolver el ambiente original a la vieja mansión con ayuda de modelos históricos.
Malplaquet House fue vendida por 2.950.000 £, aproximadamente 4,2 millones de dólares.
Rebosante de inusuales y extrañas antigüedades tales como cabezas de ciervo, bustos, estuas clásicas y otras reliquias bien preservadas, la vieja mansión de cuatro pisos ofrece una oportunidad única para explorar artefactos históricos, religiosos y arquitectónicos. Sus renovados ladrillos del siglo XVIII protegen un tesoro de golosinas históricas y antigüedades que podrán disfrutar sus nuevos propietarios.
A diferencia de otras mansiones abandonadas ahora en ruinas, la Casa Malplaquet tiene por delante un espléndido futuro y seguramente pasarán muchas décadas antes de verse en la situación anterior.
Fotografías Philippe Debeerst
Vía Husmeando por la red