El 20 de agosto de 1949, The Washington Post publicó un artículo sobre el supuesto exorcismo que tres sacerdotes habían practicado cinco meses antes a un niño –al que citaban bajo el nombre ficticio de Robbie Mannheim– aquejado de un mal que ningún médico había acertado a diagnosticar. Según el relato, por la noche se oían golpes en su cuarto, volaban objetos y luego aparecían arañazos y moratones en su cuerpo. Así que su familia acudió desesperada al jesuita Raymond J. Bishop, quien dictaminó que era un caso de posesión diabólica y escribió el diario de donde procede la información de los hechos que armaron tanto revuelo.
Vía Muy Interesante
No hay comentarios:
Publicar un comentario