Los mayores de 65 años que sobreviven a un desastre natural se enfrentan a la ausencia de cuidados médicos, a la pérdida de familiares, amigos y hogares y al aislamiento social, lo que repercute en su salud mental. Tras encuestar a más de 3.500 ancianos supervivientes del terremoto y el tsunami que asolaron Japón en marzo de 2011, un equipo de científicos revela que la pérdida cognitiva aumenta, sobre todo, por la destrucción de sus casas.
Fuente: Noticias
No hay comentarios:
Publicar un comentario