Ciervos, marmotas, ratones, caracoles o insectos desempeñan un papel central en los ecosistemas de pastos. Si faltan, las redes tróficas y los ciclos de nutrientes se desintegran; el ecosistema colapsa. Un experimento realizado en los Alpes suizos revela además que las comunidades de invertebrados son los que finalmente mantienen el ecosistema en funcionamiento.
Fuente: Noticias
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