domingo, 24 de julio de 2016

Freedom: la herramienta que te ayuda a ser más productivo... quitándote internet

Uno de los mayores secretos para ser productivo, y que a menudo explico cuando me preguntan de dónde saco el tiempo para escribir varios libros al año, consiste en evitar interrupciones en períodos de unos 30-120 minutos. Cuando tienes una tarea por delante, sobre todo si nos da pereza llevarla a cabo, a menudo la realizamos a la vez que, ocasionalmente, consultamos el correo, respondemos el Whatsapp, etc. También suele ocurrir en el ámbito laboral que cualquier compañero puede venir a interrumpirte.

Sin embargo, si consigues trabajar fluidamente una o dos horas totalmente concentrado, ese tiempo puede equivaler a una jornada completa de trabajo tradicional. Hay diversos trucos para conseguir esta concentración, como acudir a una biblioteca, ponerse música o efectos de sonido relajantes... pero ¿e internet?

Si ponemos el modo avión de nuestro teléfono móvil podemos evitar ciertas interrupciones, pero no calmamos del todo nuestro ansia de novedades: basta con dedicar unos segundos para desactivar el modo avión y consultar un momentito el correo. Para evitar estas tentaciones, existe Freedom, una aplicación gratuita que desactiva la opción de navegar en un ordenador o en móvil de 1 a 480 minutos.

Hasta ahí no hay novedad con el modo avión o sencillamente desconectar internet. El secreto reside en que no podrás volver a navegar bajo dos circunstancias: hasta que no transcurra el tiempo establecido o hasta que no reinicies el equipo. El hecho de reiniciar da bastante pereza y te hace invirtir el suficiente tiempo como para desincentivar la tentación. Incluida la de engañarte a ti mismo.
Imagen | James Cridland2769699053_d30f4d22bf_o.jpg

También te recomendamos

Cuántas muertes han evitado los móviles en las conquistas de las montañas más peligrosas del mundo

La colaboración es más poderosa que el dinero o la desmonetización de los servicios

La tecnología lleva abaratando el periodismo desde hace 100 años: asumamoslo

-
La noticia Freedom: la herramienta que te ayuda a ser más productivo... quitándote internet fue publicada originalmente en Xataka Ciencia por Sergio Parra .



Vía Xataka Ciencia

OLO permite imprimir en 3D gracias a la luz blanca del smartphone

Olo Impresora 3d OLO es un dispositivo que usa una resina blanca que se endurece cuando es bañada por la luz blanca de las pantallas de los teléfonos móviles, lo que permite imprimir en 3D capa por capa.

Es suficiente con descargar la app, que ofrece una amplia variedad de diseños, escoger el deseado, y poner el smartphone bajo la base de la impresora, donde se sitúa el depósito de resina.

Si necesidad de ajustes previos, la app indica al smartphone qué píxeles de su pantalla iluminar y durante cuánto tiempo, según la forma del diseño escogido. Con sus 780 gramos de masa, OLO cabe en cualquier sitio.

Lo que diferencia a la impresora OLO 3D no es su tamaño, o que haga uso de una aplicación móvil, sino más bien el material que utiliza y la técnica de impresión. La compañía OLO asegura haber descubierto un material que ellos llaman "daylight resin", que es una especie de fotopolímero diseñado para reaccionar a la luz blanca emitida por los teléfonos móviles.

Las primeras impresoras OLO estarán disponibles en octubre, pero sus creadores ya están preparando una versión para tablets y otras ediciones más ambiciosas para objetos con mejor resolución y mayor tamaño que se lanzarán entre marzo y septiembre de 2017.

También te recomendamos

Cuántas muertes han evitado los móviles en las conquistas de las montañas más peligrosas del mundo

[Vídeo] Las tabletas son las nuevas estrellas del Mobile World Congress

Tu cerebro cambia cuando tecleas en el teléfono móvil

-
La noticia OLO permite imprimir en 3D gracias a la luz blanca del smartphone fue publicada originalmente en Xataka Ciencia por Sergio Parra .



Vía Xataka Ciencia

Cómo se guían los colibríes para evitar colisiones a gran velocidad

A más de 50 km/hora, los colibríes son capaces de evitar objetos en pleno vuelo y de pararse repentinamente ante los obstáculos. Un estudio revela, por primera vez, que estos diminutos pájaros, protagonistas de nuestro #Cienciaalobestia, emplean una estrategia diferente a la de los insectos para guiarse sin colisionar: se basan en los cambios de tamaño de los objetos y no en la velocidad a la que estos pasan a su lado. 



Fuente: Noticias

Si estás dispuesto a explorar, atente a las consecuencias

Travel 1209355 960 720 Si consigues alejarte unos millones de kilómetros de la Tierra, hasta que solo es un punto azul pálido rodeado de millones de galaxias, tomas perspectiva, y te preguntas: ¿por qué la gente otorga tantísima importancia a ideas y costumbres cuando solo son menudencias en un universo incomprensible?

¿Para qué tanta defensa de creencias y costumbres si en unos años estaremos muertos? ¿Para qué tanto miedo y reverencia si al final nuestro sol se convertirá en una gigante naranja y engullirá la Tierra?

Compass 691146 960 720

El poco tiempo que tenemos aquí, resulta al menos entretenido o esclarecedor el buscar, explorar y someter a crítica lo que consideramos falso o insuficientemente fundado a fin de evitar el sufrimiento o, en el mejor de los casos, acercarnos a la belleza de la verdad, esa verdad siempre inalcanzable.

Somos polvo en mitad de polvo haciéndonos preguntas insignificantes y aproximándonos pesarosamente a determinadas parcelas de la verdad.

Somos polvo en mitad de polvo haciéndonos preguntas insignificantes y aproximándonos pesarosamente a determinadas parcelas de la verdad (básicamente localizando patrones o modelos que nos permiten predecir lo que pasará, y saber por qué pasa lo que pasa o pasó lo que pasó), y, sin embargo, nos golpeamos el pecho y nos ofendemos a la mínima cada vez que alguien cuestiona o ridiculiza nuestro, por definición, sistema de creencias cuestionable y ridículo.

No importa lo que creamos, siempre pensamos que es mejor creencia que la ajena, y más importante: que esas creencias nos definen y su destitución afecta a nuestra reputación de tipos sagaces, así que las defendemos con encono, nos autoengañamos si alguien descubre el pastel y nos aferramos finalmente a ellas no ya como verdades dogmáticas e indiscutibles, sino también como pavimento donde sostener todo lo que somos.

Sin embargo, la única forma de explorar es moverse, dejar el pavimento que nos sostiene, hallar nuevos descubrimientos, soportar la crítica y el ludibrio de quienes no piensan como nosotros, y hacerlo con deportividad y la mente abierta. La única forma de explorar y descubrir pasa por vaciar las alforjas lo máximo posible, soltar lastre para no parecer un fanático atrapado en sus cuatro muros quebradizos y sofocantes impuestos por la cultura religiosa, moral o laica vigente.

Boy 509488 960 720

Quien se lanza a explorar debe estar preparado para cambiar su punto de vista de las cosas, su punto de vista sobre su importancia relativa en el mundo y, ante todo, debe estar dispuesto a cambiar y progresar, asimilar y matizar, todo lo que cree, todo lo que opina, todo lo que siente. De lo contrario, el que explora no se está moviendo del sitio o transporta consigo su pequeña atmósfera de ideas, siempre manteniéndose aparte de todo lo demás, como una pieza de museo expuesta en un viril.

Quien se lanza a explorar debe estar preparado para cambiar su punto de vista de las cosas, su punto de vista sobre su importancia relativa en el mundo.

Quien está dispuesto a explorar no considera que sus cuatro verdades sobre el mundo constituyen la verdad absoluta, de lo contrario acabará siempre desconfiando de otros puntos de vista y ofendiéndose a la mínima, obligando a todos los que se crucen en su camino a que se la cojan con papel de fumar. Todo por miedo y rabia a aceptar que solo es un simple explorador rodeado de cosas que ignora.

Todo porque ha asociado su Yo a esas cuatro verdades, en vez de asumir que su Yo debe estar siempre evolucionando en función de lo que descubre en su exploración, y en consecuencia solo se adhiere temporalmente a unas y otras ideas. Y por tanto las ideas no le definen como explorador y tampoco como individuo, sino el continuo trasiego de las mismas, su movimiento exploratorio, sus evoluciones e involuciones, sus epifanías o seppukus, siempre en movimiento, como nubes en un cielo turbulento. Eso es el Yo, movimiento. Lo contrario es parálisis, muerte cerebral.

Quien está dispuesto a explorar debe asumir que quizá se encontrará con una tribu pintoresca que viste con taparrabos y lleva a cabo costumbres ridículas, ofreciendo explicaciones a fenómenos naturales que, de todo punto, son erróneas, producto de su imaginación o de su necesidad de llenar sus huecos de ignorancia con mitos y explicaciones reconfortantes. Entonces tú dirás la tuya, exhibirás lo que sabes, encenderás tu mechero para demostrar que puedes hacer fuego.

No importa si la tribu te erige como su nuevo Dios, o si estalla en carcajadas ante tus ideas, totalmente ridículas en comparación con su sistema de creencias. Eso es lo de menos. Lo importante, lo verdaderamente importante, es que el explorador sabe que frente a esa tribu con taparrabos quizá se está mirando en un espejo.

También te recomendamos

La verdad existe: ¿qué es una revisión sistemática?

¿Es malo para la vista leer con poca luz?

Cuántas muertes han evitado los móviles en las conquistas de las montañas más peligrosas del mundo

-
La noticia Si estás dispuesto a explorar, atente a las consecuencias fue publicada originalmente en Xataka Ciencia por Sergio Parra .



Vía Xataka Ciencia