Investigadores de la Universidad de Granada han comprobado que, en contra de la creencia popular, los coches de color rojo no son percibidos por las personas como más peligrosos que los demás, ni los conductores los asocian con un riesgo mayor que el resto. Lo han confirmado analizando la reacción de un centenar de conductores viendo aproximarse a coches de diferentes colores.
Fuente: Noticias
No hay comentarios:
Publicar un comentario