De todas las injusticias que la industria textil puede cometer, el trabajo infantil está entre las peores. Un ejemplo son los campos de algodón de Uzbekistán, donde más de 2 millones de niños, algunos tan sólo de 7 años, se ven obligados por su gobierno a trabajar 10 horas al día, dos o tres meses cada año.
Vía Noticias de Ecoportal
No hay comentarios:
Publicar un comentario